Amaneceres


Otra vez
tengo encima de mi piel
el sello de tus caricias.
Hago espuma de papel
con burbujas de tu risa.

Hoy conseguí acercarme
a la esquina de tu pecho
para alcanzar lo prohibido
fundidos en este lecho:
el roce en la piel, piel siente;
latidos del corazón
que entre tus labios
se encienden.

Nos acompañan al fondo
las notas que más nos gustan:
"Siento a través de mi piel
las pinceladas del aire,
que dibujan un boceto
en el calor de su arte.
Siento en mi piel excitada
la línea de ese dibujo
que colorean tus manos
y que mi alma ha aceptado.
Siento en mi piel el contacto
de tus dedos inspirados,
que derraman gota a gota
el color del alma al aire."

Cuanto más lejos viajan los acordes,
más oscuro es el abrazo
que quiere sujetar
lo que ya es fuerte:
el roce en la piel, más quiere;
llamada del corazón
que la sangre no detiene.

Claro lazo entre los dos
que amarrado, crecer quiere.
Tapo y abro a la vez
el espacio de tu calma.
De nuevo me dejo hacer
excitantes alianzas;
te dejo ser mensajera
de suspiros de marea,
del balanceo de una rama;
me dejo... y te dejo ser
la dueña de mi mirada,
la guía de mi pasión
en el renacer del alba.